En Francia, el transporte es el sector más contaminante, por delante de la agricultura y la construcción. De hecho, representa aproximadamente un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de nuestro país, es decir, unos 136 millones de toneladas de CO2 cada año, según el informe Secten 2020 del CITEPA (Centro Interprofesional Técnico de Estudios de la Contaminación Atmosférica).
¿Estas cifras te hacen girar la cabeza?
Gracias a Nina, fundadora de Green Up, por esta estupenda infografía. Green Up es un medio de comunicación comprometido e independiente para reconectar con la naturaleza, tomarse un tiempo, tomar conciencia y actuar en favor del medio ambiente.
Un recorrido por la huella de carbono de los principales medios de transporte
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El plano ✈️
El sector de la aviación representa 3 % de los GEI del transporte. Sin embargo, este resultado sólo tiene en cuenta los desplazamientos internos dentro de nuestro país. Si se tienen en cuenta los desplazamientos internacionales hacia y desde Francia, el tráfico aéreo representa casi 14 % de estas emisiones. Según un estudio publicado en Naturaleza Cambio climáticoLas emisiones de dióxido de carbono representan sólo un tercio del impacto de un avión en el medio ambiente. De hecho, las estelas blancas de los aviones de gran altura también emiten otros gases que contribuyen al cambio climático, lo que convierte a los aviones en uno de los medios de transporte más contaminantes.
Algunas compañías aéreas ofrecen compensar los viajes. ¿Buena idea o lavado verde? Invertir en un proyecto medioambiental (por ejemplo, plantar árboles) no anula en absoluto la contaminación generada por el transporte aéreo. Sólo alivia un poco la conciencia de los pasajeros. Hay un desfase entre la duración de un viaje en avión, que es una contaminación inmediata, y el crecimiento de un árbol durante varios años. Los bosques no pueden almacenar una cantidad ilimitada de dióxido de carbono. Además, la vida de un árbol puede verse afectada por varios peligros (enfermedades, incendios, etc.).
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El coche 🚗
Es el modo de transporte más utilizado por los franceses y representa la mitad de los GEI del sector del transporte. La mitad de los desplazamientos en coche son de menos de 5 km. 4 de cada 10 franceses que hacen un viaje de casa al trabajo de menos de 1 km lo hacen en coche. A modo de comparación, el mismo trayecto puede hacerse en 10 minutos a pie o en unos 4 minutos en bicicleta.
¿Coche térmico o eléctrico? El coche eléctrico es promocionado por muchas campañas publicitarias, pero no es tan limpio como parece. La fabricación de un coche eléctrico emite casi el doble de CO2 que la de un coche con motor de combustión. La contaminación del agua y del suelo se duplica, como mínimo, debido a la extracción de metales para la fabricación de la batería. El impacto del carbono también depende de la energía utilizada para cargarlo (nuclear, carbón, gas de esquisto, etc.). También está la cuestión de su hipotético reciclaje cuando llegue al final de su ciclo de vida. Por desgracia, no existe un coche "verde". Si nos centramos sólo en el uso y no en la fabricación: el coche eléctrico tiene menos impacto que el coche térmico, en Francia, debido a nuestro mix energético
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El tren 🚆
Entre los buenos resultados, el ferrocarril es uno de los medios de transporte más respetuosos con el medio ambiente (en Francia, sin embargo). El tráfico ferroviario representa menos de 1 % de los GEI del sector del transporte. A modo de comparación, un viaje de París a Toulouse en avión es 50 veces más contaminante que el mismo viaje en tren.
Sin embargo, cada tipo de tren tiene un impacto diferente. De media, un TER contamina más que un TGV, pero mucho menos que un coche. De hecho, algunas líneas TER aún no están electrificadas y funcionan con gasóleo.
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La bicicleta 🚴♀️
Es inequívocamente el modo de transporte menos impactante (junto con los desplazamientos a pie en distancias cortas). No se necesita combustible ni electricidad, ya que la energía proviene exclusivamente del ciclista, al menos en el caso de la bicicleta convencional. Es bueno para la salud y para el planeta.
En cuanto a la bicicleta eléctrica, al igual que el coche eléctrico, el impacto del carbono procede principalmente de la fabricación de la batería y de la fuente de electricidad para recargarla.
Así, por su forma de producción, la bicicleta eléctrica es dos veces más contaminante que la tradicional. Por supuesto, sigue siendo una buena alternativa al coche.
El mismo problema existe con los patinetes eléctricos. Además, los patinetes de autoservicio tienen una vida media de un mes, cuando no acaban en el agua, causando contaminación ambiental y sanitaria.
Otros impactos
Además de los problemas de fabricación y utilización de un medio de transporte, había que tomar otras medidas previas. Para construir carreteras, pistas de aterrizaje y líneas de ferrocarril, fue necesario deforestar, destruir campos, construir hormigón, etc., y así artificializar el paisaje.
¿Quieres ir más allá?
El sitio mi impacto en el carbono permite, para un número determinado de kilómetros, calcular la huella de carbono de cada medio de transporte. Para los viajes largos, no olvide mostrar el impacto de los arrastres para el avión.
Este artículo fue escrito por CarolineSu lema es "sé el cambio que quieres ver en el mundo".
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